DÍA #4

Hoy me atreví a escuchar mi antiguo PlayList y le digo antiguo, porque no lo escucho desde que mencionaste las temidas palabras por muchos y de alivio para otros, "tomemos un tiempo", desde ese momento odie cada canción de mi lista, todas traían recuerdos a mi mente y las que no, empezaron a hacerlo; decidí crear una nueva, pensando en ese momento seria solo para lo que durara el "tiempo" y de ahí volvería a mis canciones de siempre. Y pues... no fue así. Hasta hoy no podía escuchar "mi" música ni para bañarme.

Fue todo un reto, hoy mientras escuchaba música random y en aleatorio toco "nuestra" canción, que en realidad tal vez ni recuerdes, pero yo lo tengo impreso en mi memoria, el año en que te conocí, aproximadamente hace 5, esa canción era de mis favoritas y cada que te veía automáticamente la relacionaba contigo, (por si les da curiosidad la canción se llama Carried Away - Passion Pit), en si habla de dejarse llevar por alguien mas, así haya miedo; y créeme, me moría de miedo; yo siempre tuve todas la de perder.

Era la chiquita que te pareció bonita y pues porque no, no tenias nada que perder, salias conmigo y si funcionaba pues ya y si no, simplemente dejabas de hablarme y ya, tan simple como eso. Quien imaginaria, que no fue nada simple, que después de las primeras sonrisas, todo se convirtió en platicas hasta la madrugada y besitos a escondidas, que aunque tu no querías admitirlo, no era solo tu "saliente" o una mas de tu lista de chicas a conquistar, que después de un tiempo, simplemente no entendías porque me "extrañabas". En ese instante, debo ser honesta, me gustabas y te quería mucho, pero sabia que tu no ibas a arriesgarte conmigo, al menos no en ese momento; aun así, no huí, siempre me quede a la expectativa y cada que te rompían y volvías a mi llorando estuve ahí, aun recuerdo cuantas madrugadas y en cuantas borracheras debí curarte. Ahora tal vez todos piensen que fui una tonta, aguantando que me tomaras como una "saliente" o una "amiga especial", pero como lo mencione, sentí que debía estar contigo, para curarte. Si bien luego de un drama de dos años me canse de esa posición, pasaron muchos eventos que te hicieron volver nuevamente a mi y ahí fue cuando decidimos empezar lo que tuvimos, al menos de una forma seria. En ese momento y solo en ese yo decidí tomar el riesgo de entregarte mi amor, confiando en que tu también lo harías.

Mientras escuchaba "nuestra" canción, recordaba todas estas cosas vividas, que me hacen cuestionarme mi valor; y no mi valor para mi misma, sino el valor que siempre me diste. Tenias la seguridad que siempre estaría ahí, no me había dado cuenta, pero tal vez te odie un poco por eso, a quien le gusta saber que te tienen tan asegurada como persona que simplemente no hacen el esfuerzo para hacerte sentir amada.

Eso fue sabes, te la puse fácil, jamas te decía que no a nada, siempre te permití todo; no me arrepiento, en ese momento pensé que era lo mejor, sentía que hacerme respetar era "hacerme la difícil" o "la de rogar"; que equivocada estaba, si tan solo mis limites hubieran sido mas altos, tal vez hubieras notado antes lo que valía o te hubieras rendido y nada de esto pasaría. Pero pues, repito, no se puede volver en el tiempo.

Me enamore de las heridas que me causaste, porque no podía creer que me ocasionarías nuevas, no te creía capaz. Pero lo fuiste, una y otra vez, sin disculpas; porque todo era justificado, siempre había un motivo y yo debía comprender. Supongo que nunca pensaste en mi, cuando me decías que no me querías, ni cuando me dejaste bajo la lluvia después de nuestra primera "cita", porque pues, no fue una "cita" y no tenias porque llevarme a casa. Hoy me dolió mucho escuchar "mi" música, pero creo que puedo volver a hacerlo. Al final todo antes de "nosotros", yo ya lo había perdonado. Me dolió en realidad porque me di cuenta lo ingenua que fui, por no decir tarada, porque después de todo, estando ya juntos seguí aguantando las nuevas heridas, justificándolas, justificándote siempre, no era necesario que me expliques, no podía creer que me hacías daño, me engañaba y le echaba la culpa al cansancio, al alcohol o simplemente a que no sabias como controlar tus emociones. Solo no quería perderte, no me importaba engañarme a mi misma; y bueno, ya no voy a justificarte, diciendo que no querías decir o hacer lo que hiciste, tu sabias como me sentía, tal vez no quisiste hacerme daño, pero lo hiciste; al final, al recordar todo esto, solo me queda mas claro que la culpable de todo esto, fui yo.